Tengo un hijo de 4 años, recuerdo que
todos me decían antes de cumplir los 2 años que ya vería lo terrible que sería
con esa edad porque aparecían los tan temidos berrinches. Llegaron los 2 años y
debo decir que era adorable, pero cuando llegó a los 3 años nos pareció que
había tenido un año para acumular todo lo malo y así entrar con ganas en el
mundo de gritos, lloros y pataletas.
Si estáis leyendo esto, entiendo que tenéis un hijo y seguramente como todos los padres comprometidos sentiréis la necesidad de obtener un poco de orientación para lograr sobrellevar situaciones generadas por ese proceso madurativo que tienen todos los peques y que no tiene edad de aparición por lo que a mi experiencia se refiere, en unos aparecen a los 2 en otros más temprano o más tarde.
En cuanto a crianza y disciplina, hay
muchas opiniones variadas, pero calma, que también hay muchos tips que realmente
funcionan, y si uno falla podéis pasar directamente al otro, hasta encontrar un
método con el que os sintáis cómodos y vuestro hijo pueda lograr gestionar sus
emociones.
Llenaros de paciencia y ser consistentes
Es una de las primeras cosas que se debe
intentar. Ser consistentes, a veces porque os desesperáis, le dais una galleta
o le entregamos lo que quiere para que deje de llorar y esto no funciona porque
le estáis enviando mensajes confusos. Es importante ser firmes y sobre todo
cumplir lo que se dice. Si ya habéis dicho no, pues es no. Los niños necesitan
mensajes directos, yo me he equivocado muchas veces en este punto y seguro me
pasará otras tantas veces más, pero hay que evitar caer en la tentación de
cambiar nuestra primera decisión porque hemos visto una sonrisa, o un "no
lo vuelvo hacer", tener firmeza es esencial si queremos crear límites en
nuestros pequeñajos.
Lo
que sembréis hoy, lo cosecharéis en acciones mañana y os sentiréis muy
orgullosos de no haber cedido.
Evita la palabra "No"
Claro, al menos que vuestro hijo esté en
peligro. Pero para cosas cotidianas que no atentan contra su seguridad, por
ejemplo si se está quitando los zapatos en la calle, en vez de decir "No",
probar con decir "espera que lleguemos a casa". De esta manera él no
percibe prohibición, percibirá una opción diferente . Ser positivos a la hora
de guiarles y seguramente evitaréis muchas frustraciones.
Razonar con él
Esto que quede muy claro, durante un
berrinche es imposible, así que esperar a que se tranquilice para intentar
explicarles que su comportamiento anterior no ha sido el correcto por la razón
que sea. Incluso desde pequeños, podemos comenzar a razonar con ellos . Los
primeros años lo mejor es insistir pero crear
un hábito de comunicación verbal o no verbal es fundamental . Aunque
creáis que no os entienden, la manera en cómo le hablamos les hará sentirse
seguros o no
Las
emociones de un niño son tan intensas como las de un adulto y por eso es
importante teneros como guía para aprender a conocerse, aceptarse. De los 3 a 5
años podéis razonar y negociar con él a través de las consecuencias, partiendo
siempre desde su experiencia ya que no puede prescindir de ella.
Dejad que se desahogue sin vosotros
perder la razón
Llenaros de mucho amor, compasión y
paciencia con vosotros mismos
Conoceros y amaros , ¿Por qué? Porque que la inteligencia emocional
con la que os manejéis con el resto del mundo marcará el modo en cómo os
comportaréis con vuestros hijos. Tener un buen autoestima hace bastante y da
ejemplo a vuestros peques, preocuparos de no pasar vuestras frustraciones a los
niños , sentiros bien y todo marchará con naturalidad.